dijous, 29 de desembre del 2011

MI PACIENCIA NO ES INFINITA

Mientras sufro la penosa travesía por el desierto que supone no poder concentrarme en la lectura de un libro, a pesar de serios intentos, veo un poco lo que últimamente ha nutrido este blog.

Los Talking Heads.
Corea del Norte.
La cuestión política del estado.
The Office.
La web de Orsai.

Todo tan deslabazado e inconexo que me da hasta apuro. Menos mal que la realidad política me echa una mano, me da tantos motivos para deprimirme que luego todo es alegría a su lado. Eso evita que 1. vaya al médico a que me recete algo que favorezca mi concentración y 2. que someta a los incondicionales a una serie de monográficos sobre músicos que han llamado mi atención, que empezaría por A reminiscent drive y acabaría por las Zhané. A la altura de la letra C, o antes, todo el mundo abandonaría entre quejas y recriminaciones y menciones a la Enciclopedia y otros improperios.

Ayer fue el día de los Inocentes, y eso constituye otra pequeña ayudita. Entre noticias de falsos fichajes y falsas bajas de jugadores (parece que sólo la prensa deportiva se atrevió con las bromas - la prensa general parece estar llena de ellas prácticamente cada día), me llama la atención la broma radiada por RAC1 a eso de las 11 de la mañana, cuando invitaron y entrevistaron a David Bustamante, que presentaba su última flatulencia, y a lo que se ve tenía cosas que alguien consideró interesante oir sobre ella.

Señores de RAC1 : aguanté, porque es posible que fuese lo más prudente, el silencio otorgado al tema del 15-M. Comprendo, dinero manda, los progresivos acercamientos al poder (lo del sol que más calienta). Pero igual que (espero) nadie se plantea tertulianos al estilo telecinco a primera hora, uno tiene que tener cierto criterio y no arrastrarse por el lodazal. OT es el lodazal, es el estercolero, y ya ha habido demasiados deslices con insufribles musiquillos que se insertan con calzador en eso que llamáis Racústic. Cuidado conmigo, RAC1, jugáis con fuego porque puedo hacer mucho daño desde esta trinchera.

Justo esta es la frontera que no franquearé (pues incomprensiblemente encuentro fascinante esa intro con cuerdas y guitarra ligeramente cinematográfica). Aparte de esa extraña fascinación respecto de la chica, que nunca sé si es guapa o no. Ésta y Bebe, de la que parece que ya haga muchísimo tiempo.




2 comentaris:

  1. Bon, no seas tan duro...el estiércol hace falta...mi madre que tiene 90 años siempre dice que, David Bustamante es el cantante que la hace sentir...que le vamos ha hacer!!

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  2. Lydia, no sin sentirlo en el alma: lo de OT es innegociable, mal que me pese. A pesar de lo cual debe reconocerse ciertas virtudes al estiércol, ninguna de las cuales llego a apreciar.

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